EESO N° 3025 Cristo Obrero

El proyecto trabajado lo titularon “Comunidades protegidas”. En el marco de esto y a lo largo del tiempo, luego de introducirse en la temátcia el grupo diseñó tarjetas con diferentes conflictos cotidianos, que luego compartieron con los niños, quienes debieron decir si los habían vivido y qué acciones habían tomado. Esto estimuló el reconocimiento de experiencias propias, el intercambio de ideas y la empatía hacia otros que enfrentan situaciones similares.

En paralelo, se propuso realizar actividades en el patio de la escuela, en las que se  movilizaron dinámicas lúdicas y participativas, como el juego de Jenga, Twister, mensajes en soja y el juego del tesoro escondido. La consigna en todas ellas fue priorizar la comunicación respetuosa, el control de las acciones y el rechazo a comportamientos violentos o agresivos, promoviendo la reflexión sobre cómo el lenguaje y las acciones impactan en las relaciones humanas y en el clima escolar. Durante estas actividades, además se incentivó a los estudiantes a identificar cómo responder ante conductas violentas o intimidatorias en su entorno, fortaleciendo su capacidad de intervención y su compromiso en la promoción de ambientes seguros.

En la jornada se realizaron diversas actividades:

• Proyección del video “Puente” y análisis de las tarjetas entregadas con conflictos cotidianos dentro de la escuela.  

• 4 esquinas, dinámica para sensibilizar e introducir en la violencia.

• Twister, jenga y tesoro escondido: La consigna de los mismos era competir sin enojarse ni dirigirse de mala forma (ni física, ni verbal) al contrincante.